Docente Afrocolombiana y sus hijos fueron víctimas de racismo, rechazo, golpes y hasta abusos sexuales en un colegio de Paya, Boyacá.
En el corregimiento de Morcote del municipio de Paya, Boyacá, una familia de raíces Afrocolombiana fue sometida a un infierno total por la discriminación y racismo de la sociedad.
La familia conformada por la profesora de ingles Kerlin Murillo Mena y sus dos hijos, que un busca de escapar de la violencia del Choco, terminaron en un colegio de Boyacá tras ser designada como docente en la institución Educativa El Rosario.
Lo que empezó como alegría, terminaría convirtiéndose en una historia de terror para Kerlin Murillo y sus dos hijos menores de edad que se vieron lastimosamente violentados, acosados e incluso violados.
A mitad del 2021, los hijos de la docente Kerlin, Keiner Joel Córdoba, de 5 años, y Keyler Yojackson Córdoba, de 9 años, fueron matriculados en la institución que los dejaría traumados de por vida.
“Nos atacaron por pertenecer a la población negra y afrodescendiente. Por la pigmentación de nuestra piel fuimos agredidos de todas las formas, hasta el punto de que mis hijos fueron abusados sexualmente” Dijo entre el dolor y llanto la madre de los dos menores.
Una vez dió inicio la presencialidad con el retorno de los colegios a las aulas de clase, fue cuando empezó esta desgarradora historia.
“Cuando decidimos entrar a la presencialidad, efectivamente no les caí bien simplemente por mi pigmentación de piel. Desde ese momento iniciaron conmigo una segregación social y racial, además de acoso laboral. No sé cómo lo resistí” palabras de Kerlin.
La Profesora que se mostraba fuerte ante estos actos de racismo en ningún momento se dejó quebrar, sin embargo, fue por esto que los abusadores decidieron arremeter y acabar con sus hijos, “Me dieron en el talón de Aquiles, mis niños”.
Asegura un testigo que todo este atropello inició cuando La docente empezó a luchar por los derechos de los estudiantes de la institución el Rosario, donde le exigía tanto a la educación como a los entes pertinente apoyo “Ella entró a hablar por eso y se echó de enemigos a los profesores, rector y secretaria, todos se fueron contra ella. Incluida la familia de un concejal, Jorge Tabaco Largo, pues su hija es la secretaria y el nieto estudia ahí”.
Inmediatamente con el rechazo de los profesores, inició el repudio por parte de los estudiantes, que guiados por las actitudes de sus docentes los imitaron.
La fuerte violencia que recayó en los dos hijos de la docente fue un acto de no creer, se les golpeó al punto de enviarlos al hospital, los violaron y les hicieron sentir la severidad del racismo.
“Comenzaron por echarle orín en la boca a Keiner, el de preescolar. A meterle el pene en la boca, lo accedían carnalmente metiéndole el pene en su ano y le golpeaban. En una de las agresiones, cuando el niño no quería dejarse, le amarran el pene con una cabuya y lo tiran. Aún dice que le duelen los testículos. Lo subían a la parte alta del tobogán para tirarlo al vacío, ocasionándole una fractura en el cráneo que hasta hoy persiste. Ha deteriorado el proceso cognitivo de mi hijo” Crudas palabras de la madre.
La agresión sexual a Keiner de 5 años fue el golpe más duro, puesto que “presuntamente”, fue desgarradoramente violado por 7 niños de la institución.
Las desgarradoras palabras de Keiner “Un niño de bachillerato me lanzó al piso desde esas escaleritas y me empezó a decir ‘váyase, negro hijo de puta’. Después de que me caí, me ha dolido el brazo y me duele al moverlo”.
Parte medico.
El parte expedido por el hospital muestra que el niño cuenta con desgarro en la parte posterior del ano, así como una fuerte herida por el exceso a la cavidad.
“Le decían a Keiner “mi perrita” por el tema del abuso sexual, por eso empezó a pelearse para defender a su hermano. Presentaba lesiones en las cejas, mentón, pecho y la oreja rota. Los niños no podían ni salir el fin de semana, porque esta situación se llevó a la vía pública. Los apedreaban”.
El rector se comunicó.
El Rector desmintió que en la institución se promoviera el racismo, calificando como “Blasfemia” todas las acusaciones que hizo la docente sobre él y los docentes.
Así mismo aseguró: “los golpes podrían no ser propinados por los demás estudiantes, sino por peleas entre hermanos y por la madre al corregirlos”, por lo cual hacía a la madre responsable de las violaciones contra los niños.
“Esta señora Kerlin corregía y castigaba a sus hijos de una forma muy violenta. Son testigos los profesores de que llevó a los niños al colegio, cogió una vara y les dio una muenda”, denunció el rector.
En cuanto a la violación sólo afirmó que no ocurrió dentro de la institución y no comentó más, puesto que afirma el caso corresponde a las autoridades pertinentes.
De momento la mujer fue reasignada a un punto de trabajo mientras se sigue el conducto regular de investigación.
El repudio a este tipo de actividades es nacional, es inaudito que una familia haya tenido que pasar por esta cruda situación de racismo por el simple hecho de tener un color de pial distinto.
Ante este acto de Racismo de pronunció la viceprecidenta.
Los niños traumados dicen: “Ya no quieren tener la piel negra, me dicen que quieren untarse de barro para no ser negros y que los dejen de atacar”, confesó, la madre entre lágrimas.
El equipo informativo de Wintor ABC presenta su apoyo a esta familia y así mismo rechaza todo acto de violencia, racismo y demás que pueda afectar la vida e integridad de las personas.