En Necoclí, un municipio ubicado en el Urabá antioqueño, 100 familias campesinas celebran un cambio profundo en su día a día gracias a la entrega de viviendas rurales nuevas impulsadas por el Gobierno del Cambio.
Este avance forma parte del Programa de Vivienda Rural, una estrategia nacional que busca disminuir las desigualdades históricas del campo colombiano y garantizar mejores condiciones de vida para quienes laboran y habitan en estas zonas.
Durante una visita al territorio, la directora de Vivienda Rural, Marisella Calpa Gómez, recorrió varias veredas del municipio y conversó directamente con las familias que hoy cuentan con un hogar digno.
Las comunidades coincidieron en que estas construcciones representan mucho más que una estructura física: significan estabilidad, seguridad y la posibilidad de proyectar un futuro más tranquilo para sus hijos.

Viviendas pensadas para el campo y su cultura
Las casas entregadas fueron diseñadas con criterios que respetan las dinámicas y costumbres de la ruralidad. Cada unidad habitacional fue construida en mampostería de concreto y cuenta con aproximadamente 55,65 metros cuadrados distribuidos en tres habitaciones, cocina, baño, un cuarto de herramientas y un área social central que favorece la integración familiar.
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Además, los calados y espacios abiertos permiten una adecuada ventilación, ideal para el clima cálido de la región y para las actividades cotidianas del campo.
El proyecto, que contó con una inversión cercana a los $15 mil millones, se financió gracias a un aporte del Fondo Nacional de Vivienda (Fonvivienda), que asumió el 80 % de los recursos, y a la empresa antioqueña VIVA, encargada del 20 % restante.
Entre los hogares beneficiados está el de Marelvis Berrio, una mujer que esperaba desde hacía años la oportunidad de tener techo propio. Con alegría y palabras sencillas, expresó lo que significa este logro para su familia:

“Gracias al presidente y a la ministra tengo esta vivienda. Me siento feliz, me siento dichosa de tener mi casa, que era mi anhelo”, comentó mientras mostraba los espacios de su nuevo hogar.
Como ella, decenas de familias resaltaron que esta entrega les brinda tranquilidad y seguridad, especialmente en un territorio donde la informalidad en la vivienda había sido una preocupación constante.
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Avances que acortan la brecha rural
Este proyecto es parte de una apuesta más amplia del Gobierno del Cambio por cerrar brechas sociales en las zonas campesinas, mejorar las condiciones de habitabilidad y reducir el déficit habitacional en el país.
La entrega de viviendas rurales en Necoclí demuestra que es posible llevar infraestructura digna a los territorios históricamente olvidados y avanzar hacia un campo más equitativo y con oportunidades reales.
Con estas acciones, el Gobierno nacional ratifica su compromiso con las comunidades rurales, impulsando proyectos que cambian vidas y fortalecen el arraigo de las familias a sus tierras.
Fuente: MinVivienda

